Indefensión aprendida

La indefensión aprendida es creer que no vas a poder hacer frente a una situación, que no vas a poder “defenderte” de un cierto acontecimiento, debido a que en el pasado no pudimos, y hemos “aprendido” que esta vez tampoco podremos hacerlo.

Cuando esto ocurre podemos generar comportamientos y conductas de pasividad, como si “hacer algo no mereciera la pena”, creyendo que se haga lo que se haga no habrá nada que cambie la situación.

Seligman estudió la indefensión aprendida. Hizo un experimento con perros. En el experimento había dos perros, ambos iban a recibir una descarga. La diferencia estaba en que el primero podría apagar la descarga apretando una palanca, mientras que el segundo no, sería aleatoria.

Posteriormente estos mismos perros que habían aprendido su condición, pasaron a una sala en la que el suelo emitía descargas. La forma de que esto parara era llegar a un pequeño muro que había en la sala y saltarlo.

El primer perro, que previamente había aprendido lo de la palanca, encontró el modo de llegar y dejar de recibir descargas. Sin embargo, el segundo, se quedó en la sala sin hacer nada, asumiendo su condición de recibir las descargas.

El segundo perro había asumido una condición pasiva, de resignación. No busco y no fue más allá, porque aprendió que no podía hacer nada, aun si pudiera hacer. Él se lo había creído y lo había interiorizado.

Por ejemplo:

Carmen está acostumbrada a que en su grupo de amigos nunca le den valor a su opinión. Siempre que hacen planes, ella propone y siempre la invalidan. No le dan espacio a lo que ella quiere, ya que siempre <<es una tontería>>. 

Un día Carmen, iba a salir con un grupo nuevo de amigas de la universidad. Estas comenzaron a hacer lluvia de ideas de los planes que pueden hacer ese Viernes. Carmen se limitaba a escuchar sin opinar. Cuando le preguntaron qué plan quería hacer ella, simplemente dijo que <<me da igual>>. Carmen había aprendido un papel pasivo, sin exponer sus apetencias, había aprendido a que no era  escuchada ni tenida en cuenta.

Así que en esta nueva situación pensaba que sucedería lo mismo y simplemente se comportaría desde el automatismo pasivo de la indefensión aprendida.

Cuando no hay resultados positivos ni refuerzos se genera una sensación/percepción de falta de control, generando esa pasividad. 

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